sábado, 12 de diciembre de 2009

Oaxaca



Hay días en los que pedimos y se conceden nuestros deseos... hoy ha sido uno de esos días en los que el alma se esponja mientras nutre y es nutrida con y por los demás..

He asistido a un concierto de música antigua celebrado en torno a una organización no gubernamental española dedicada desde 1988 a la cooperación internacional y hoy presente en 17 paises de Africa, América Latina y Europa del Este con proyectos de educación, salud, habitabilidad, agua y saneamiento, desarrollo productivo, microempresa y formación para el empleo. Este concierto permitirá sostener proyectos en Perú, Uganda y México.

Para ello hemos contado con la amabilidad de una persona de Oaxaca que se ha trasladado a Madrid para compartir su experiencia.

Se preguntaba tras los primeros 15 días de sus muchos años al frente de esa labor, por qué era la realidad tan injusta... por qué no está más repartido el dolor... y vió que ella o la ong no eran la respuesta a esa pregunta... nadie somos salvadores de otro... pero si podemos darle nuestro corazón... tener interés, verdadero interés en la persona, en sus necesidades, no en las necesidades en abstracto... sino en esa persona que tenemos delante, en nuestra realidad.

la respuesta no es quitarles el dolor, sino darles afecto, el afecto que a su vez recibo de otros yo. de forma que ellas a su vez, cuando ven que se les quiere, que no se les da las cosas que no sirven porque son pobres, sino las que nos gustan a todos, pueden decir: "Como me habeis dado vuestro corazón yo quiero ahora dar mi corazón" como hoy dicen estos niños de Oaxaca y los adultos que viven allí.

Uno aprende a ser más sencillo, comentaba esta persona, "Educando nos dejamos educar".

No se trata por tanto de hacerlo todo y que ellos no pongan de su parte, ni de darles cosas a nivel material, sino de compartir responsabilidades hasta que ellos son lo bastante capaces para querer hacerlo solos.

Desde las circunstancias de la realidad, atravesarlas, sacando lo positivo que hay en todo lo que nos rodea.

Gracias a este concierto, a esta persona y a otras con las que en la cena he estado charlando, hoy comprendo mejor lo que nos mueve a actuar.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Bella...



Me gusta ver que mis hijos crecen en todos los sentidos... y encuentro que hay ocasiones especiales, en el día a día, en las que a través de una mirada, de un gesto o de una ocasión como esta, la prueba de un vestido de las hermanas mayores, hace que miremos con perspectiva el esfuerzo del que tantas veces nos quejamos... este de educar... de transmitir valores y tratar de sacar lo mejor que llevan dentro... es en estos momentos, cuando la realidad nos hace un guiño, cuando disfrutamos de ello y lo envolvemos en papel de regalo...

Quererles con locura y querer matarles cada día.... Bella y Bestia son....