Puede ser.....

A lo largo de la vida queremos muchas cosas, y eso no está mal, ya que demuestra nuestra inquietud por crecer, por mejorar, por tener una vida confortable y denota una ambición que se inscribe dentro de los límites normales de esa lucha sana por acceder a una mejor calidad de vida.

Ahora bien, cuando convertimos esas cosas que queremos en imprescindibles, allí comienzan nuestros problemas.

Mientras no seamos capaces de renunciar a algo que queremos, corremos el riesgo de caer en una dependencia que bien puede ser afectiva o material.

La diferencia entre deseo saludable y necesidad podría ser interpretada como una cuestión de apreciación que depende de la intensidad que le pongamos.

Cuando deseamos algo con tal necesidad que resulta imperioso obtenerlo, a eso le llamamos necesidad.

En la vida hay pocas necesidades, mejor quedarnos con los deseos y esforzarnos por conseguirlos, por lograr nuestros sueños.

Puede ser que los logremos..... puede que no.....